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Movilidad rural: cómo nuestras soluciones de TAD ayudan a reconectar los territorios?

La movilidad rural es un problema importante. La brecha entre las zonas urbanas densas y el resto del país, donde vive más de uno de cada tres franceses, es cada vez mayor. Ante la escasez y la lejanía de los servicios y las zonas de empleo, las zonas rurales también están poco o nada comunicadas por el transporte público. El 62% de los franceses que viven en zonas rurales citan la falta de una solución adecuada como la principal razón para no utilizar el transporte público para desplazarse (Ipsos-Transdev, 2019).

Desde su creación, Padam Mobility se ha propuesto hacer más eficiente la movilidad inteligente, y por tanto más accesible, a las zonas poco pobladas. Hacerse cargo de la movilidad de las personas que viven en zonas periurbanas y rurales ofreciendo soluciones de movilidad compartida sostenible es una misión a la que la empresa responde a diario mediante la creación de servicios de Transporte a la Demanda (TAD y TPMR). Mejorar los desplazamientos para todos y facilitar el acceso a los servicios y al empleo.

Nuestras soluciones han demostrado su eficacia en las zonas rurales porque se adaptan fácilmente a los problemas locales y ofrecen respuestas pertinentes a los problemas que encuentran los agentes de la movilidad en esta zona. Porque permiten reducir el coste por trayecto, al aumentar el atractivo de los servicios y, por tanto, el número de pasajeros, al tiempo que se reducen los costes de explotación al minimizar los trayectos en vacío en la medida de lo posible. También porque se adaptan y se integran en una oferta de movilidad centrándose en la parte más difícil: el servicio fino para los usuarios más alejados de las carreteras principales. Responden en particular a las siguientes cuestiones

Pertinencia de la oferta de movilidad

  • Tener en cuenta las limitaciones locales y adaptarse a los distintos casos de uso.
  • Complementar la oferta de transporte público convencional.

Calidad del servicio

  • Reducción de los costes de explotación y mejora significativa del rendimiento de los servicios Dial-a-Ride y PMR (Población con Movilidad Reducida). 
  • Simplificación de las tareas del centro de llamadas: reserva y procesamiento más rápidos, asignación automática de trayectos. 

Experiencia del usuario y transición digital

  • Reducción de los tiempos de reserva.
  • Potenciación de los usuarios mediante la introducción de nuevos canales de reserva (página web y aplicación móvil).
  • Mejora de la experiencia de los pasajeros: reservas en tiempo real, con varias fechas o recurrentes, notificaciones de recordatorio, interfaces ergonómicas.
  • Accesibilidad y sostenibilidad. 
  • Reducción de la huella de carbono y de las partículas finas mediante la optimización de las rutas y el uso compartido de los viajes
  • Adaptación a todo tipo de flotas de vehículos.
  • Mutualización de los servicios TàD y TPMR para una oferta universal y 100% accesible.

En Châlons-en-Champagne, Saint-Omer, Bretaña o Pays de la Loire en Francia, en Renania-Palatinado en Alemania, las soluciones TAD y TPMR de Padam Mobility han sabido adaptarse a las limitaciones y desafíos locales tanto de los territorios como de sus habitantes para mejorar la movilidad de las poblaciones rurales, reducir su dependencia del coche privado y reforzar su autonomía en los desplazamientos. En estos ámbitos, los operadores de transporte y las autoridades públicas han decidido conjuntamente fomentar una movilidad alternativa inteligente y flexible, basada sobre todo en plataformas de gestión innovadoras. Gracias a los servicios de transporte basados en reservas (TAD y TPMR), se han puesto en marcha nuevos medios para gestionar y garantizar el acceso a una movilidad más inclusiva y sostenible. Estos medios permiten una transición gradual hacia desplazamientos más virtuosos e incluso sin emisiones de carbono, reducen el impacto del coche individual y mejoran el acceso a las zonas de empleo y servicios. 

La implantación de soluciones inteligentes de TAD y TPMR dinámicas garantiza a los operadores y a las comunidades beneficiarse de ventajas inmediatas:

  • Aumento del número de pasajeros y reducción de los costes de explotación por viaje gracias a la mejora de la experiencia de los usuarios y a la introducción de nuevos canales de reserva dirigidos a grupos de usuarios más amplios (jóvenes, personas mayores, personas que se desplazan al trabajo, personas ocasionales). Por ejemplo, los servicios de TAD triplican su número de pasajeros de media cuando están equipados con la tecnología de Padam Mobility.
  • Optimización de los recursos agrupando los servicios en una única plataforma para maximizar su uso. Estas plataformas también pueden adaptarse a cualquier tipo de vehículo y grupo de usuarios, garantizando una asignación de recursos y una gestión del servicio óptimas.

El potencial y los nuevos casos de uso que permiten estos servicios de transporte basados en reservas abren nuevas perspectivas:

Repensar la oferta de movilidad en su totalidad

  • Mientras que el transporte público regular es viable con un mínimo de densidad de demanda, los TAD y los TPMR inteligentes pueden configurarse para conectarse a las redes de transporte público regular, aumentando así su número de usuarios en lugar de competir con ellos. 
  • A la luz del desarrollo de las soluciones de movilidad como servicio, el TAD y el TPMR representan una de las opciones de movilidad rural que contribuyen a mejorar el servicio global de un territorio y los desplazamientos sin interrupciones.

Adaptarse rápidamente y sin costes adicionales a los nuevos usos que han surgido con la crisis sanitaria

  • El TAD dinámico y el TPMR permiten crear servicios de transporte sanitario inteligente en las zonas rurales dedicados a las personas más vulnerables para dar servicio a los centros de atención o de vacunación, para descongestionar o para complementar las líneas regulares respetando las medidas sanitarias.
  • Como la crisis sanitaria pone de manifiesto las limitaciones de vivir en un entorno urbano, los habitantes de las áreas metropolitanas están emigrando a las zonas rurales, donde el entorno vital es más agradable. Estos recién llegados, neorurales, que a menudo no tienen coche (ni siquiera carné de conducir), traen consigo nuevas expectativas y exigencias en cuanto al acceso a una movilidad receptiva que se adapte a sus estilos de vida.